Cómo educar a un perro: Enseñarle trucos
A muchos propietarios de perros les encanta enseñar trucos a su mejor amigo: dar la pata, tumbarse de lado, hacerse el muerto, rodar sobre sí mismo, pasar por debajo de las piernas… Son muchísimos los trucos que puede aprender el perro, aunque cada uno tiene un nivel de dificultad diferente. Mientras que algunos, como dar la pata, son muy sencillos, otros requieren mayor tiempo y trabajo ya que deben enseñarse como un encadenamiento de varios ejercicios, en cualquier caso te mostramos aquí cómo educar a un perro y enseñarle trucos.
En este artículo te damos algunos consejos para enseñar trucos a tu can mientras los dos disfrutáis aprendiendo, verás que educar perros no es tan complicado:
En primer lugar, debes tener paciencia. Todos los perros necesitan tiempo para aprender algo nuevo. Algunos lo hacen antes y a otros les cuesta un poco más. Enseñarle trucos es como educar a tu mascota: hace falta paciencia, tiempo, esfuerzo y trabajo diarios.
Comienza en un lugar tranquilo, donde no haya distracciones. El parque o la calle no es buen sitio para empezar a enseñar trucos nuevos a tu perro. Es fácil que se distraiga con las personas, los perros que están de paseo o que se asuste con ruidos fuertes como los de vehículos, obras. Comienza en casa donde será más fácil que se concentre y esté pendiente del ejercicio y le que le estás pidiendo.
Tienes 2 formas de conseguir que tu compi haga un truco:
1º - Capturar la conducta: esto quiere decir que, cuando el perro hace algo que te gusta, debes reforzárselo para aumentar las probabilidades de que vuelva a hacerlo. Al fin y al cabo, este es el objetivo de los refuerzos. Por ejemplo, si tu perro te da la pata por iniciativa propia y le refuerzas por ello, será más probable que te la vuelva a dar en otra ocasión. Cuando refuerzas esto varias veces, será muy fácil conseguir que te de la pata.
2º - Enseñarle el ejercicio por completo: cuando el perro por su propia iniciativa no hace la conducta que deseas. Para la mayoría de trucos, este es el caso. Hay varias formas de enseñar una conducta compleja al perro, pero lo ideal es siempre “desmenuzarla” en conductas simples más sencillas. Por ejemplo, si quieres que se haga el muerto, antes habrá que enseñarle a tumbarse. Cuando sepa tumbarse, tendrás que enseñarle a ponerse de lado mientras permanece tumbado en el suelo.Una vez le has enseñado el ejercicio, debes ponerle nombre. Por ejemplo, cada vez que te de la pata, dile “pata” o “dame la pata” y refuérzale. Tras varias repeticiones, cuando le digas “dame la pata” te la dará sin problemas. En el ejemplo de hacerse el muerto, cuando has practicado varias veces la posición de tumbarlo de lado, empieza a decirle “muerto” y le premias mientras permanece tumbado de costado. En este último caso, por tanto, deberías seguir la siguiente secuencia: lo mandas tumbarse, luego le guías hasta que se tumbe de lado, le dices “muerto” y le das el premio.
Usa siempre refuerzos positivos: comida, caricias, juguetes. En la educación de nuestros perros es lo más recomendable para que su estado emocional sea positivo y el proceso de aprendizaje sea más lúdico y favorable. Lleva algo más de tiempo que otros sistemas de adiestramiento pero no comprometes la salud mental del perro y, lo más importante, tu mascota realmente aprenderá el ejercicio y no actuará de tal o cual forma para evitar un castigo o una regañina. Al fin y al cabo, si le enseñas trucos a tu compi es para que ambos disfrutéis.
Como ves, enseñar trucos nuevos a tu perro es una tarea entretenida que requiere tiempo y paciencia, igual que su educación. Siguiendo unos sencillos consejos conseguirás que tu mascota te de la pata, se haga el muerto o pase entre tus piernas. Trabajando en forma de juego y usando refuerzos, además, mejoraréis vuestro vínculo y disfrutaréis más haciendo cosas juntos.