La nutrición animal es la disciplina o conjunto de estudios que se centran en la alimentación de los animales. Normalmente, cuando hablamos de nutrición animal, nos solemos referir a la alimentación de nuestras mascotas o animales de compañía, teniendo en cuenta no sólo el momento de la ingesta, sino también de la asimilación de dichos alimentos y de cómo influyen en su crecimiento, desarrollo y salud.
Los animales son seres heterótrofos o, lo que es lo mismo, seres que necesitan alimentarse con materia orgánica ya elaborada. Esto quiere decir que, para transformar estos alimentos ya elaborados, necesita de una serie de procesos para asimilar los nutrientes, los cuales se dan en el aparato digestivo.
Para que estos nutrientes, una vez asimilados y transformados, se transporten por todo el cuerpo se hace uso del aparato circulatorio. Y, para que las células puedan convertir estos nutrientes en energía se necesita oxígeno, el cual se obtiene gracias al aparato respiratorio.
Una vez que los alimentos se han transformado y convertido en la materia y la energía necesarias, hay unos restos, o desechos, que se expulsan en forma de CO2 y de excrementos, éstos eliminados a través del aparato excretor.
Los animales, como las personas, han de tener unos hábitos y una alimentación compensada y variada que, a su manera, les aporte todo aquello que resulte necesario para su bienestar y, también, evite cualquier cosa que resulte perjudicial para su salud.
Cuando hablamos de la nutrición de perros y gatos, hay que tener en mente siempre las características de estos animales y, más concretamente, también las peculiaridades propias según su edad, peso, tamaño, raza, enfermedades, etc. De esta manera, conseguiremos que la asimilación de los alimentos que les demos sea la más apropiada posible para que obtengan todos esos aportes nutritivos que requieren.
Una alimentación adecuada ha de conseguir que todo el proceso de la nutrición se complete de manera óptima y, si falla alguno de los procesos que toman parte de ésta, habrá que buscar las causas y encontrar un remedio.
Además de los alimentos, en la nutrición también influyen otros factores relacionados con los hábitos de vida del animal, que sin duda pueden afectar decisivamente. Y, entre estos hábitos, podemos incluir desde su actividad física hasta el trato y la relación que pueda tener con sus dueños u otros animales, ya que, en el fondo, cualquier aspecto de su vida que pueda influir en su estado de ánimo también influirá en su nutrición.
Un animal sano no deja de ser el que tiene una alimentación adecuada y un estilo de vida saludable. No basta con que les demos a nuestras mascotas los alimentos de mejor calidad, también hay que cuidar de sus hábitos y estado de ánimo, porque todo influye. Recuerda, un animal feliz tiene más fácil conseguir un estado físico saludable.