La nutrición ortomolecular, también conocida como medicina ortomolecular o veterinaria ortomolecular, es un tipo de terapia que se centra en el suministro de determinados alimentos, nutrientes y vitaminas, con la intención de complementar la dieta habitual y las carencias que esta pueda tener, sobre todo en los casos en los que nuestras mascotas sufran de algún déficit o patología.
Cada vez hay un mayor interés entre los dueños de mascotas acerca de este tipo de terapias, por lo que aquí vamos a tratar de explicar cuáles son las bondades y los peligros de la nutrición ortomolecular.
Desde un punto de vista inicial, considerando que la nutrición ortomolecular se basa en dietas específicas y suplementos nutritivos y vitamínicos, podemos pensar que no existe ningún peligro para nuestras mascotas.
De lo que nos tenemos que asegurar es de que cualquier cambio en su dieta, aunque sea un simple suplemento vitamínico, no afecte a su salud y su desarrollo negativamente. Entre los peligros que muchos médicos y veterinarios achacan a la nutrición ortomolecular se encuentra la hipervitaminosis, que no es otra cosa que un exceso de vitaminas en el organismo, que también puede resultar perjudicial. En el caso de sobrepasar los límites recomendados de determinadas vitaminas, nuestras mascotas pueden sufrir de cefaleas, náuseas y otras enfermedades.
Lo que sí tenemos que tener claro es que, ante un trastorno serio o una patología diagnosticada por nuestro veterinario, la nutrición y la medicina ortomolecular no deberían ser sustitutivas de las terapias convencionales, ante los posibles riesgos de que la enfermedad se agrave y sus consecuencias sean mucho más complicadas de resolver.
Realmente no hay avales científicos que respalden las bondades de la nutrición ortomolecular. De hecho, el Ministerio de Sanidad español la cataloga como pseudociencia, equivalente a otras terapias naturales como la abrazoterapia, cuyos riesgos siempre van a ir asociados a la renuncia de la medicina y la veterinaria convencional en pos de usarla como único tratamiento.
Aunque no haya evidencias científicas de los beneficios de la nutrición y la medicina ortomolecular, sí que hay testimonios de gente que declara haber utilizado este tipo de terapias con buenos resultados y, de por sí, son escasos los casos en los que haya ocasionado fallecimientos.
En conclusión, si estás pensando en la nutrición ortomolecular como un tipo de terapia o de complemento para tu mascota, te recomendamos consultar siempre a tu veterinario y a tu nutricionista animal y que nunca, nunca, consideres que a través de un cambio en la dieta y con suplementos vitamínicos puedes prescindir de la medicina convencional, porque podrías poner la vida de tu mascota en riesgo.