Tiendas de mascotas: ¿es necesario comprar?

Mucha gente acude a las tiendas de mascotas cuando quiere ampliar su familia con una mascota. Es una opción habitual en muchos casos, sobre todo cuando hablamos de mascotas pequeñas o en casos particulares.

Pero cuando queremos hacernos con un perro o un gato, las opciones son mucho más amplias y las tiendas de mascotas no siempre es lo primero que nos viene a la mente. A la hora de adquirir un perrito o un gatito siempre hay alternativas distintas a las tiendas de mascotas que, sin significar que sean mejores necesariamente, pueden suponer un gesto, una ayuda o un ahorro que mucha gente valora y prioriza.

Quiero una mascota. Alternativas a las tiendas de mascotas

Si estamos pensando en añadir un nuevo miembro a nuestra familia y nos apetece compartir nuestra vida con un perro o un gato, podemos ir a las tiendas de mascotas y comprar un cachorro. Ésta es una opción fácil y accesible, ya que siempre hay muchas tiendas de mascotas cerca de casa y los trámites no son muy complicados siempre que encontremos el cachorro que nos gusta y tengamos el dinero que haga falta para su compra. La documentación y los papeleos de las vacunas son bastante sencillos, ya que estos pasos son habituales para estas tiendas y, realmente, no van a suponer un gran trastorno.

Pero hay que tener en cuenta que existen alternativas a las tiendas de mascotas, y las hay muy buenas. Por ejemplo, la perrera. Es la opción más clásica, porque en prácticamente todos los municipios siempre ha habido una perrera municipal que acoge y recoge a los perros y gatos –y otros animales también –que quedan abandonados en las calles o que, por alguna razón, pierden a sus dueños.

En los últimos años también han proliferado las casas y centros de acogida para adopción, que hacen una función más o menos similar en el fondo, y cuya labor es realmente encomiable para ayudar a los animales sin hogar y concienciar a la gente de que un perro o un gato no es un juguete que se puede desechar cuando uno se aburre de él.

Estas dos opciones son geniales si creemos que una mascota puede participar en nuestra vida y que le podemos aportar y dar todo ese cariño y atención que le ha faltado. Además, en prácticamente toda nuestra geografía hay perreras y centros de acogida cercanos, que no sólo nos atenderán con todo el cariño posible, sino que también nos ayudarán y asesorarán para que nuestro nuevo amigo tenga una vida feliz como tanta falta le hace.

Como tercera alternativa, aunque distinta de la adopción, también encontramos los criaderos especializados. Éstos, sobre todo en el caso de los perros, suelen llevar años criando un determinado tipo de perros, o una raza en concreto, cuidando su pedigrí y vigilando que todos cumplan unos requisitos particulares en cuanto a sus características físicas y su salud.

Los criaderos especializados suelen prestar una atención exquisita y son la opción perfecta en el caso de que busquemos un tipo de raza particular, con unas características y condiciones concretas y nos queramos asegurar en la medida de lo posible de que su salud y desarrollo van a ser óptimos.

Entonces, ¿debo evitar comprar en tiendas de mascotas?

No queremos decir que las tiendas de mascotas sean malas. De hecho, muchas de ellas son tiendas que prestan una atención y un servicio estupendo. Es cierto que, en alguna ocasión, da la sensación de que las tiendas de mascotas simplemente mercadean con los animales, y que la sensación de inseguridad con respecto al trato que han recibido, sobre todo antes de estar expuestas al público, no ha sido el óptimo. Pero esos pequeños cachorros no tienen la culpa y, al comprar uno, seguro que le vas a dar una vida mucho mejor que la que tienen allí en ese habitáculo del escaparate.

Al final, lo más importante de todo es que, si decides ampliar tu familia con un perrito o un gatito, sea cachorro o adulto, sea de tiendas de mascotas o de un centro de acogida, le des todo el cariño y atención que se merece.